Hace una semana mis amigos del trabajo y yo fuimos a comer a Casa Tía María, lo había visto en eltenedor.es (gracias una vez más Marcos), y tenía buena pinta, a parte contaba con un 50% de descuento en carta, por lo que fuimos alli de cabeza, que somos jóvenes y con economía ajustada.

En febrero saqué un hueco para pasar un fin de semana express en Bélgica, visitando Bruselas, Brujas y Gante, por favor, abstenerse diabéticos porque la cantidad de azúcar que alli se maneja no es normal.

Ahora que empieza el otoño, y que las vacaciones han acabado, una buena escapada por tierra belgas es una forma de desconexión muy recomendable.

Bruselas a parte de ser una ciudad cómoda, acogedora y con una arquitectura de cuento, en el tema gastronómico me recordó mucho a París, con esos minirestaurantes con encanto.


Concretamente la noche que llegamos fuimos a cenar a Fin de Siecle, en el Barrio de Sainte Catherine, donde comimos codillo con mostaza, patata y ensalada (bomba de relojería para la noche) unas salchichas extragrandes y una ensalada con jamón y queso. Muy bueno, pero muy fuerte para cenar, la mostaza pasa factura.

Esta entrada se la quiero dedicar a todos mis amigos de Valladolid por los buenos momentos que hemos pasado siempre, y no sólo gastronómicos.

Entrar en Los Zagales y probar sus tapas no tiene absolutamente nada que ver, esa decoración rústica con una barra de mármol y mucha madera alrededor choca completamente con esas curiosas-divertidas-diferentes-... tapas que alli sirven.

Mini-bocadillo de calamares y emulsión de ajo. Estaba recién hecha, crujiente...la curiosidad es que el envoltorio en este caso se come.

En una de mis escapadas del mes de agosto, decidí ir con la familia, osea mi padre y mi madre, a comer a este restaurante situado en el casco antiguo de Zamora.

Como curiosidad decir, que probamos un aceite que a mi me gusta mucho, y que lo he probado o mejor dicho puesto, en otra versión ya que mi madre lo compraba en formato crema de manos y que ya no lo encontramos, asi que si alguien sabe donde lo podemos localizar que lo diga por favor.

Ayer domingo, aprovechando el buen tiempo que sigue haciendo por la capital, decidimos ir a comer a un sitio de freiduría, porque una vez al año (o muuuuchas más), no hace daño.


Yo ya estaba babeando encima de la carta sólo con leerla, por lo que empezamos a pedir, pedir, pedir...se nos fue de las manos. Es lo que tiene llegar con mucha hambre, aún así no sobró nada.



La atención normal, muy rápida eso sí, el ambiente bueno aunque estuvimos en la terraza y respecto al precio en torno a 28€ por persona, merece la pena.

Están en Travesía de Costa Rica 28, y sí, a pesar de que nosotros no lo hicimos, sí admiten reserva.

PD: Este fin de semana he estado en el mercado de San Antón y no precisamente comiendo en el restaurante como la otra vez, sino en la zona de tapeo, de lo más recomendable, eso sí, preparen el bolsillo.

Seguir en twitter a la revista "muy interesante" es cuanto menos, interesante, valga la redundancia.
El otro día leí un curioso artículo en el cual decía que "comemos menos, si usamos un tenedor grande", hasta estos detalles hemos llegado.

Lo que sí sabía y de hecho lo he comprobado, es que a la hora de servir la comida en un plato, es mejor hacerlo en un plato pequeño que en uno grande, ya que en el pequeño te da la sensación de que está lleno, en cambio en uno grande parece que no te han servido mucho, y al fin y al cabo, ambos tienen la misma cantidad. ¿Una bobada?, yo creo que no, es una forma de engañar al ojo e indirectamente al estómago.

Hay pequeñas cosas que no nos cuesta nada hacer y podemos mantenernos en forma y evitar el sobrepeso o la sobrealimentación, ¿otro ejemplo muy conocido?, bájate una parada de metro antes y vete andando hasta la universidad o al trabajo. Que no hay metro, pues aparca el coche más lejos, bájate antes del autobús...¡hay que moverse!

Otro año más llegaron Las Victorias (fiestas de Puebla de Sanabria, Zamora) y otro año más mi amiga Celia nos invitó a pasarlas en el maravilloso hotel que su familia posee en plena plaza mayor, La Posada de las Misas.

Acogedor, coqueto, con unas vistas (y perdonad la expresión) acojonantes, esta posada fue adquirida por el padre de la criatura, Paco Somoza, hace ya unos años, el cual con sus dotes y su varita mágica llamado lapicero, hizo de ese lugar lo que es hoy en día, un sitio donde te sientes como en casa, abrazado por paredes de piedra.

Una vez instalada la pata de jamón en el baño, que comience la fiesta, Las Victorias, fiestas populares de Puebla de Sanabria, toro de fuego incluido (pero el de mentira, no tembleis antitaurinos) y gastronomía al 200%, todo esto hace que mi estancia alli sea inmejorable.

El sábado por la noche decidimos bajar a cenar al restaurante. Lo hacemos todos los años, es un espacio bien decorado, tranquilo, con unas sillas comodísimas y con una terraza impresionante que nunca podemos disfrutar porque vamos de noche.


Pudimos degustar unos ricos entrantes a base de milhojas de pimientos y ventresca, con tomate triturado (papá gracias por conseguirnos esos tomates, tomates de verdad que llamo yo).


Un rico revuelto de setas y gambas y unos mejillones grandes como nunca los había probado, a la plancha, son una delicia, no llevan ningún tipo de salsa, aunque van soltando un jugo que ninguno se pudo resistir a mojar el pan al acabarlo :)

Mi opción para el segundo fue lomo de buey, porque sí, porque estamos en tierra donde hay una carne roja que no hay paladar que se lo resista, y por lo tanto he estado todo el fin de semana comiendome a las vacas de alli en distintas versiones, chuleta, solomillo, filete, bocadillo...

A parte la gente se pidió carrillera, chuleta de ternera y bacalao, por lo que me comentaron estaba muy bueno todo, vi platos limpios y algunos se debieron de comer hasta el palo.


De postre una tarta de queso, de volverte loco, que suavidad! Lo vuelvo a repetir, yo no soy de dulce pero de esta me convierto en creyente.


Lo que vino después me lo guardo para los de la mesa, la verdad que lo pasamos muy bien.

Situado en Plaza Mayor 13, Puebla de Sanabria (Zamora)

PD: Una vez más gracias a Somoza's family, nos volveremos a ver el año que viene en el mismo lugar, y a todos aquellos que esteis interesados en hacer una incursión en la profunda Sanabria ya sabeis, #LaPosadaDeLasMisas es la opción correcta.