Sabemos que lo único que no se puede comprar con dinero es el tiempo. Vale, la felicidad, el cariño, bla bla bla, pero no quiero estropear esta frase lapidaria con la que quiero comenzar la entrada.
Dicho lo cual, ¿qué tal pagar un café en función del tiempo que estés allí?
Ya lo había leído en algún sitio que otro, pero hasta ayer no fuimos a topar con el local en cuestión. Situado en el concurrido barrio de Shoreditch, Ziferblat es una cafetería, perdón, un apartamento situado en el primer piso de la calle Old Street, con vistas, ambiente hogareño y con multitud de relojes donde el tiempo es oro. ¿A cuánto se cotiza? 3 peniques el minuto, osease, 1,80 libras la hora, ¡no está mal! Sincroniza tu cronómetro y acércate a disfrutar de un break a contrareloj.
viernes, 31 de enero de 2014
martes, 28 de enero de 2014
Wasabi, japonés barato en Londres
Cambiamos Europa por Asia, concretamente nos vamos al país del sol naciente, así que quítate el pijama y ponte el kimono para encontrarte más agusto.
Wasabi aparte de ser un condimento que "pica" mucho (muchísimo), también es una cadena de restaurantes japoneses lowcost la mar de socorrido.
Allí puedes encontrar una gran variedad de piezas de sushi (nada del otro mundo, pero sí muy correctas), bebidas japonesas, edamame (la tentación de los japoneses ya que te lo comes como pipas), onigiri aka el sandwiches japonés, o incluso una parte "caliente" donde encontrarás noodles y diferentes tipos de tempura.
Para comer allí, para llevar e incluso ¡servicio a domicilio! Referente al precio, lo que te quieras gastar y el hambre que lleves, pero por ejemplo lo normal son 5 libras, ya que 2 piezas de sushi es 1 pound. Son rápidos y es un sitio limpio y moderno, y para mi prima Ana y para mi se ha convertido en nuestro lugar de referencia los viernes tras una jornada de running por Hyde Park.
Situado en 58 Oxford St, London (hay muchos en Londres)
Consejo nutricional: El wasabi es el perejil para los japoneses, se lo ponen hasta al KitKat. Como propiedades destacaría que es bueno para despejar las fosas nasales, ¡es alucinante! y más que por su picor, destaca por su intensidad que gracias a dios dura muy poco.
Wasabi aparte de ser un condimento que "pica" mucho (muchísimo), también es una cadena de restaurantes japoneses lowcost la mar de socorrido.
Allí puedes encontrar una gran variedad de piezas de sushi (nada del otro mundo, pero sí muy correctas), bebidas japonesas, edamame (la tentación de los japoneses ya que te lo comes como pipas), onigiri aka el sandwiches japonés, o incluso una parte "caliente" donde encontrarás noodles y diferentes tipos de tempura.
Para comer allí, para llevar e incluso ¡servicio a domicilio! Referente al precio, lo que te quieras gastar y el hambre que lleves, pero por ejemplo lo normal son 5 libras, ya que 2 piezas de sushi es 1 pound. Son rápidos y es un sitio limpio y moderno, y para mi prima Ana y para mi se ha convertido en nuestro lugar de referencia los viernes tras una jornada de running por Hyde Park.
Situado en 58 Oxford St, London (hay muchos en Londres)
Consejo nutricional: El wasabi es el perejil para los japoneses, se lo ponen hasta al KitKat. Como propiedades destacaría que es bueno para despejar las fosas nasales, ¡es alucinante! y más que por su picor, destaca por su intensidad que gracias a dios dura muy poco.
viernes, 24 de enero de 2014
#gastrorecomendaciones fusión alimentaria
Vivimos en un mundo en el que parece que ya está todo inventado. En la moda los pantalones son para las 2 piernas, los coches tienen volante, y las casas siguen teniendo 4 paredes, pero ¿qué pasa en la alimentación? Es verdad que cada vez hay mayor número de productos, algo bueno sinceramente porque la gastronomía avanza, progresan los platos, y surgen nuevos alimentos.
Pero quiero ir más allá. Antiguamente la mayor novedad o de lo que se hablaba (a nivel de cachondeo), era el típico bocadillo de lentejas, más de un padre se lo habrá comido sí, ¿y a día de hoy?
, #foodhunter aquí en Londres, me pasó la semana pasada esta curiosa foto sobre los nuevos-alimentos-fusionados.
Hoy en día ese bocadillo de lentejas se queda corto en comparación con alimentos tales como el famoso cronuts (croissant + donuts) reconvertido hace 4 días por temas de infidelidad por parte del croissant, en el crogels (croissant + bagel).
Y ahora parece ser que lo que triunfa, la "falda-pantalón" de la alimentación se llama Mug Shot, o comer pasta en taza de té, ¿no es total? Aquí en Londres esta "guarrería" triunfará, ellos que están tan apegados a su tacita y a sus hierbas.
Pero quiero ir más allá. Antiguamente la mayor novedad o de lo que se hablaba (a nivel de cachondeo), era el típico bocadillo de lentejas, más de un padre se lo habrá comido sí, ¿y a día de hoy?
, #foodhunter aquí en Londres, me pasó la semana pasada esta curiosa foto sobre los nuevos-alimentos-fusionados.
Hoy en día ese bocadillo de lentejas se queda corto en comparación con alimentos tales como el famoso cronuts (croissant + donuts) reconvertido hace 4 días por temas de infidelidad por parte del croissant, en el crogels (croissant + bagel).
Y ahora parece ser que lo que triunfa, la "falda-pantalón" de la alimentación se llama Mug Shot, o comer pasta en taza de té, ¿no es total? Aquí en Londres esta "guarrería" triunfará, ellos que están tan apegados a su tacita y a sus hierbas.
miércoles, 22 de enero de 2014
Fitzbillies, restaurante King College
Unos días antes de volver a España por navidad, tuve una visita muy especial por tierras inglesas, mis padres. Mucha gente dice que viajar con padres es un aburrimiento y que llega un momento en que no tienes edad para ello. Yo he tenido la gran suerte de tener a los mejores compañeros de viajes, algo que llevo disfrutando desde que tenía algunos meses de vida cuando viajábamos por los pueblos y ciudades de España, porque para conocer el mundo, primero tienes que conocer tu casa.
Al caso, que me emociono y no sigo. Visita de mis padres para la celebración del cumpleaños de mi progenitor. ¿Plan? Pasarlo en Cambridge, que no lo conocíamos ninguno de los tres. Risas aseguradas, así son mis padres.
Tras visitar una ciudad enfocada sólo y exclusivamente al mundo del estudiante, con una maravillosa Universidad, hicimos parón en Fitzbillies, un restaurante que había contactado conmigo para que fuese a visitarlo y así disfrutar de su gastronomía.
Por dentro se mezcla la madera con los azulejos azúl cielo que bien me recordaban a algunas cocinas españolas de los 70, mejor dicho, a algunos baños de esas casas. Lleno hasta la bandera y con un ambiente desenfadado y curioso, ya que se mezclaban en torno a una misma mesa muchas clases de personas.
Pedimos cerveza "orgánica" (no quiero saber lo que llevan el resto de cervezas que no llevan esta palabra) que estaba realmente buena. No puedo opinar mucho más ni poner adjetivos porque soy muy novato con esta bebida.
De comer me pedí un "wild boar terrine", más conocido como carne fría de cerdo con ensalada de rúcula y yuca. Extraño tomarse una buena carne prácticamente congelada y gelatinosa (yo le hubiese puesto unos minutos de microondas), pero inculto de mi, hay que tomarla fría. El acompañamiento me gustó bastante y muy bien aliñado.
De postre nos pedimos un brownie que estaba bastante bueno ya que allí tienen muy buena mano para la repostería. La señora que nos atendió fue correcta, muy inglesa, pero correcta y de precio creo que unas 12 libras por persona (15€).
Situado en 51-52 Trumpington St, Cambridge
Consejo nutricional: Si hablamos de tubérculos, parece ser que sólo nos viene a la cabeza la patata, pero la yuca es otra opción gastronómica ya que nutricionalmente es muy parecida a la patata. Sitios como El Mesón Cubano en Madrid, la ponen exquisita, un alimento típico de culturas suramericanas e incluso africanas.
Al caso, que me emociono y no sigo. Visita de mis padres para la celebración del cumpleaños de mi progenitor. ¿Plan? Pasarlo en Cambridge, que no lo conocíamos ninguno de los tres. Risas aseguradas, así son mis padres.
Tras visitar una ciudad enfocada sólo y exclusivamente al mundo del estudiante, con una maravillosa Universidad, hicimos parón en Fitzbillies, un restaurante que había contactado conmigo para que fuese a visitarlo y así disfrutar de su gastronomía.
Por dentro se mezcla la madera con los azulejos azúl cielo que bien me recordaban a algunas cocinas españolas de los 70, mejor dicho, a algunos baños de esas casas. Lleno hasta la bandera y con un ambiente desenfadado y curioso, ya que se mezclaban en torno a una misma mesa muchas clases de personas.
Pedimos cerveza "orgánica" (no quiero saber lo que llevan el resto de cervezas que no llevan esta palabra) que estaba realmente buena. No puedo opinar mucho más ni poner adjetivos porque soy muy novato con esta bebida.
De comer me pedí un "wild boar terrine", más conocido como carne fría de cerdo con ensalada de rúcula y yuca. Extraño tomarse una buena carne prácticamente congelada y gelatinosa (yo le hubiese puesto unos minutos de microondas), pero inculto de mi, hay que tomarla fría. El acompañamiento me gustó bastante y muy bien aliñado.
De postre nos pedimos un brownie que estaba bastante bueno ya que allí tienen muy buena mano para la repostería. La señora que nos atendió fue correcta, muy inglesa, pero correcta y de precio creo que unas 12 libras por persona (15€).
Situado en 51-52 Trumpington St, Cambridge
Consejo nutricional: Si hablamos de tubérculos, parece ser que sólo nos viene a la cabeza la patata, pero la yuca es otra opción gastronómica ya que nutricionalmente es muy parecida a la patata. Sitios como El Mesón Cubano en Madrid, la ponen exquisita, un alimento típico de culturas suramericanas e incluso africanas.
lunes, 20 de enero de 2014
¡Bienvenidos al día más triste del año!
Si hoy te has levantado con algo que te inquieta, te atormenta o te perturba (como diría Esperanza Gracia #fan), no te preocupes porque ¡estás ante el día más triste del año!
Hoy, 20 de enero, es el día más triste del año. Es lunes, cosa que también influye, el tercer lunes del año, concretamente y hoy se sabe si esos grandes propósitos navideños que con tanta ilusión comenzaste, se siguen llevando a cabo.
"Pienso correr 3 veces por semana durante una hora, cenar una ensalada variada todas las noches, y no irme de casa sin desayunar, ¡ah! también ir a la piscina que me he sacado el bono mensual". ¿Cuántos de vosotros seguís con esos propósitos de nuevo año? No arqueés las cejas con cara de resignación, porque ya os dije que la CONSTANCIA es lo principal, crearte una rutina es lo principal, y tener un orden es fundamental. Pero hay una palabra de la que hablamos hace un mes y que la podemos sacar ahora, ¿sabéis cuál? La MOTIVACIÓN. Esas frases de "tú puedes", una buena playlist de música para salir a correr, un piropo en el trabajo como "que bien te queda ese vestido, ¿estás más delgada?", o algún que otro "like" en tus fotos de Instagram. Saca la motivación de donde quieras, pero que no te falte para continuar y sobre todo contágiate y contágiala.
Aún así, no desesperes, hoy todos estamos igual que tú. No tires la toalla y lo des todo por perdido, ¡no!, has hecho algo muy importante y es tener INTENCIÓN, o ¡es que en el Colegio nunca os dijeron que la intención es lo que cuenta! Hoy tómate un descanso, olvídate de esa "famosa" dieta post-navidad -detox en la que te habías embarcado, guarda las Nike 5.0 en el armario que mañana será otro día. Túmbate en el sofá con un bol de palomitas y a ver una película, porque en muchos casos es mejor caer en la tentación, que no tenernos que librar del mal después, o lo que es lo mismo, abandonar, así que como dicen en mi pueblo, ¡mañana será otro día!
miércoles, 15 de enero de 2014
Italia, Fashion Food
Ya de vuelta en casa con un Londres gris y húmedo, pero con la memoria todavía en la capital lombarda, en sus calles, en su ambiente y como no, en su comida, ¡ay la pasta! Si hasta el peor chino de Milán te la hacen exquisita.
Varias son las veces que he visitado el país transalpino, ciudades tales como Roma, Venecia, Florencia o la inclinada Pisa, pero nunca había puesto un pié en Milán.
Aterrizar, una calurosa bienvenida con unos grissini de cebolla (una especie de colines largos), y a la calle a patear la ciudad. A mi me puede el hambre, ya me conocéis, así que panzerotti en mano, me fuí a conocer el Duomo.
¿Cuál es el sitio más típico de panzerottis? El Luini, muy cerca del Duomo. Un lugar donde sólo venden eso, y donde no te puedes quedar allí para tomarlo, por lo que la estampa en el exterior es curiosa, viendo mover las mandíbulas a más de uno. De espinacas, jamón y queso, o mismamente pomodoro (tomate) con aceitunas, muy jugoso.
Y justo al lado, una heladería en la que te ponen chocolate líquido dentro del cucurucho, y dos bolas de helado a elegir, ¡pistacho es un acierto!, ya os podéis secar las babas venga.
Una zona perfecta para cenar y visitar tanto de día como de noche, es el barrio de Navigli, lleno de canales, restaurantes pequeños y buen ambiente. Esa noche fuimos a cenar al restaurante Il Brellin, recomendación de mi amiga . Yo me pedí una ensalada de alcachofas, y la esperada cotoletta, como una chuleta empanada. Me recordó a una milanesa que comí el año pasado en Berlín, ¡espectacular! De precio pelín caro, pero si nos ponemos a pedir vino y bobadas es lo que tiene, eso sí, merece la pena.
Una cosa que me ha llamado mucho la atención es lo enfocada que está la ciudad a la moda, todo vive de la moda o tiene un nexo de unión con ella. El hotel Bvlgari, el restaurante de Armani, el club de Cavalli...y para muestra un botón, ¡confitería y repostería de la mano del señor Giorgio!
Y es que casualmente este fin de semana ha sido la Milano Fashion Week (de hombre), lógicamente la ciudad ha estado revolucionada entre desfiles, fiestas y demás. El hotel Príncipe di Savoia era el epicentro de fashion victim y demás familia, es curioso verlo, hablar con la gente y porque no, disfrutar de un desayuno como Dios manda invitación de mi amigo Nick que se dedica a ello, a la moda.
Pero volviendo al mundo real, yo quería seguir disfrutando de la ciudad y la comida. Tengo muy buen recuerdo de los aperitivos que tomamos en Roma o de la mensa en Florencia en nuestra época de estudiantes.
La Rinacente, a.k.a. Harrods o en España...¿El Corte Inglés? Unas galerías donde lógicamente puedes disfrutar de un almuerzo con vistas al Duomo desde la terraza. En ellas está ubicado un corner de Santis, el primer "cuchitril" de Milán donde empezaron a hacer los famosos panini y que ha abierto "sucursal" en estas galerías. Pedirlo de cualquier tipo, están todos calientes y jugosos, y para que os voy a engañar, ¡yo me pedí 2!
Un tema interesante. La mozzarella. La usan para todo, para pasta, pizzas, paninis...menos con nutella, con todo lo demás. Mucha variedad de las mismas, y un punto a su favor ya que es un queso que lo podemos considerar ligero.
¿Qué es lo mejor de Milán? Callejear, pasear por el Duomo y encontrarte a un señor tocando el piano en plena calle, una sesión de fotos o turistas comiendose un panzerotti en las escaleras de la Piaza de San Fédele.
Como buen turista, me fui a Vittorio Emanuele a pisar los coj**** al toro, tradición que cualquier día consigue comunicar estas galerías con el metro.
¿Todavía con hambre? Por supuesto. Si os digo que podéis con apenas una porción de pizzas, ¿os lo creeis? Se llama pizza al trancio y lo dan solamente en Spontini, una pizzeria de hace años donde sólo sirven ese plato. Tomate y toneladas de mozzarela, un simple manjar por 5€.
Recomendable ir a visitar el lago Como, y quien dice el lago, dice su pueblo. Pasear y pillar un día soleado es todo un privilegio. Tomarme un Aperol en formato Spritz en una terraza, mientras disfruto de una pasta mirando al lago, sinceramente no tiene precio.
Una cantidad considerable de barcos al igual que de casas a orillas del lago y por la colina, no me quiero imaginar lo bien que se debe levantar un lugareño con estas vistas, aunque si os soy sincero, mi lago de Sanabria no tiene nada que envidiarle.
Después de tanto ocio hay que centrarse en las tendencias (gastronómicas) que llevan (comen) los italianos, como por ejemplo este formato envase perfecto para los bocadillos, ya no sólo de los niños que van al colegio, sino para cualquier ciudadano de a pie. Formato mono(bocadillo)dosis.
Ellos tienen mucho apego a su embutido y a sus patas de jamón ¡sin pata! No me puede llamar más la atención que el prosciutto venga así. Referente al resto de embutidos me ha llamado la atención que no se basan en la técnica del curado como método de conservación, sus embutidos son más tiernos.
Algún día había que comer en casa, por supuesto. Buenos productos, buen tomate, y como no, tener un buen chef en casa como tiene mi amigo Gonzalo. Yo me iría a vivir con compañeros de piso, no por su simpatía, su higiene o su carisma, no, ¡por su forma de cocinar!
Una provoleta al horno y una buena ensalada con salsa al pesto, ¡ay que todavía queda mucho para la hora de la comida!
Dejando de lado el Duomo, te puedes encontrar algún mercadillo de fruta y verdura en la calle, y hasta arte callejero como esta pared.
Y es que la zona de Navigli tiene mucha vida, los canales, o mejor dicho, el agua, da a la gente actividad y ganas de vivir en torno a ella.
Callejeando por allí fuimos a dar con Taglio, un concepto de gastronomía con visión de futuro, un lugar con rollo, como digo yo. Cuando entré pensaba que sólo era una charcutería, pero cuando pasas sus paredes de ladrillo y sus estanterías de madera, te encuentras un mundo relajante, con una pared hecha de papel de verduras, vinos a la venta, y montón de gastronomía en sus baldas.
Cuidan el detalle, y personalizan todo, se han creado una marca personal que quieren difundir desde allí. No me importaría hacerles una entrada aparte porque realmente fui todo un privilegio pasar un par de horas allí.
Otro plato que quería probar en Milán, era el risotto a la milanesa. Este venía con frutos secos (¡bravo!) como almendras o uvas pasas, un sabroso plato que recomiendo probar.
Y para rematar la jornada, el típico capuccino, que por cierto, la foto es de la cafetería más cutre donde he estado, aunque el capuccino estaba muy bueno, ¡sí hasta el del McDonalds está bueno! (yo lo he probado, pero no lo digáis por ahí).
¡Ah no, que para rematar la jornada nos quedaba el aperitivo! Ja ja ja. Supuestamente uno de los mejores de Milán (según mis amigos) es Blender, ¿por qué? por su gran variedad de platos. En pocos sitios te ponen un lomo de salmón, o te hace unos bocartes (por cierto, exquisitos aunque un pelín fríos) como aperitivo.
Un cóctel y un "sírvase usted mismo" por sólo 10€.
Il Castello Sforzesco, el museo Novecento o subir al Duomo, otra de las cosas obligatorias de Milán. Buenas vistas y un privilegio poder acceder a la cubierta de una catedral, eso sí, maldita lluvia meona, ¡el foggy foggy que llaman los ingleses!
Y es que a pesar de ser una ciudad un poco fea (con permiso de mis amigos italianos) y quizás no súmamente bonita como es Roma, tiene un encanto especial, tiene ambiente y tiene un Duomo que simplemente merece la pena la visita por eso.
Apurando el tiempo, una visita a Santa María delle Grazie, donde se encuentra la última cena, o mejor dicho, Cenando Se Entiende La Gente. Bueno realmente esa noche no se entendieron muy bien, ¡culpa de Judas!
Y para despedirme, ¡una pizza! Hay que coger energías que subirse a un avión da hambre. Gracias a Gonzalo por ser un buen anfitrión, y a todos los amigos que me han hecho pasar unos díasagotadores increíbles. ¡Ciao Milano, ciao!
Varias son las veces que he visitado el país transalpino, ciudades tales como Roma, Venecia, Florencia o la inclinada Pisa, pero nunca había puesto un pié en Milán.
Aterrizar, una calurosa bienvenida con unos grissini de cebolla (una especie de colines largos), y a la calle a patear la ciudad. A mi me puede el hambre, ya me conocéis, así que panzerotti en mano, me fuí a conocer el Duomo.
¿Cuál es el sitio más típico de panzerottis? El Luini, muy cerca del Duomo. Un lugar donde sólo venden eso, y donde no te puedes quedar allí para tomarlo, por lo que la estampa en el exterior es curiosa, viendo mover las mandíbulas a más de uno. De espinacas, jamón y queso, o mismamente pomodoro (tomate) con aceitunas, muy jugoso.
Y justo al lado, una heladería en la que te ponen chocolate líquido dentro del cucurucho, y dos bolas de helado a elegir, ¡pistacho es un acierto!, ya os podéis secar las babas venga.
Una zona perfecta para cenar y visitar tanto de día como de noche, es el barrio de Navigli, lleno de canales, restaurantes pequeños y buen ambiente. Esa noche fuimos a cenar al restaurante Il Brellin, recomendación de mi amiga . Yo me pedí una ensalada de alcachofas, y la esperada cotoletta, como una chuleta empanada. Me recordó a una milanesa que comí el año pasado en Berlín, ¡espectacular! De precio pelín caro, pero si nos ponemos a pedir vino y bobadas es lo que tiene, eso sí, merece la pena.
Una cosa que me ha llamado mucho la atención es lo enfocada que está la ciudad a la moda, todo vive de la moda o tiene un nexo de unión con ella. El hotel Bvlgari, el restaurante de Armani, el club de Cavalli...y para muestra un botón, ¡confitería y repostería de la mano del señor Giorgio!
Y es que casualmente este fin de semana ha sido la Milano Fashion Week (de hombre), lógicamente la ciudad ha estado revolucionada entre desfiles, fiestas y demás. El hotel Príncipe di Savoia era el epicentro de fashion victim y demás familia, es curioso verlo, hablar con la gente y porque no, disfrutar de un desayuno como Dios manda invitación de mi amigo Nick que se dedica a ello, a la moda.
Pero volviendo al mundo real, yo quería seguir disfrutando de la ciudad y la comida. Tengo muy buen recuerdo de los aperitivos que tomamos en Roma o de la mensa en Florencia en nuestra época de estudiantes.
La Rinacente, a.k.a. Harrods o en España...¿El Corte Inglés? Unas galerías donde lógicamente puedes disfrutar de un almuerzo con vistas al Duomo desde la terraza. En ellas está ubicado un corner de Santis, el primer "cuchitril" de Milán donde empezaron a hacer los famosos panini y que ha abierto "sucursal" en estas galerías. Pedirlo de cualquier tipo, están todos calientes y jugosos, y para que os voy a engañar, ¡yo me pedí 2!
Un tema interesante. La mozzarella. La usan para todo, para pasta, pizzas, paninis...menos con nutella, con todo lo demás. Mucha variedad de las mismas, y un punto a su favor ya que es un queso que lo podemos considerar ligero.
¿Qué es lo mejor de Milán? Callejear, pasear por el Duomo y encontrarte a un señor tocando el piano en plena calle, una sesión de fotos o turistas comiendose un panzerotti en las escaleras de la Piaza de San Fédele.
Como buen turista, me fui a Vittorio Emanuele a pisar los coj**** al toro, tradición que cualquier día consigue comunicar estas galerías con el metro.
¿Todavía con hambre? Por supuesto. Si os digo que podéis con apenas una porción de pizzas, ¿os lo creeis? Se llama pizza al trancio y lo dan solamente en Spontini, una pizzeria de hace años donde sólo sirven ese plato. Tomate y toneladas de mozzarela, un simple manjar por 5€.
Recomendable ir a visitar el lago Como, y quien dice el lago, dice su pueblo. Pasear y pillar un día soleado es todo un privilegio. Tomarme un Aperol en formato Spritz en una terraza, mientras disfruto de una pasta mirando al lago, sinceramente no tiene precio.
Una cantidad considerable de barcos al igual que de casas a orillas del lago y por la colina, no me quiero imaginar lo bien que se debe levantar un lugareño con estas vistas, aunque si os soy sincero, mi lago de Sanabria no tiene nada que envidiarle.
Después de tanto ocio hay que centrarse en las tendencias (gastronómicas) que llevan (comen) los italianos, como por ejemplo este formato envase perfecto para los bocadillos, ya no sólo de los niños que van al colegio, sino para cualquier ciudadano de a pie. Formato mono(bocadillo)dosis.
Ellos tienen mucho apego a su embutido y a sus patas de jamón ¡sin pata! No me puede llamar más la atención que el prosciutto venga así. Referente al resto de embutidos me ha llamado la atención que no se basan en la técnica del curado como método de conservación, sus embutidos son más tiernos.
Algún día había que comer en casa, por supuesto. Buenos productos, buen tomate, y como no, tener un buen chef en casa como tiene mi amigo Gonzalo. Yo me iría a vivir con compañeros de piso, no por su simpatía, su higiene o su carisma, no, ¡por su forma de cocinar!
Una provoleta al horno y una buena ensalada con salsa al pesto, ¡ay que todavía queda mucho para la hora de la comida!
Dejando de lado el Duomo, te puedes encontrar algún mercadillo de fruta y verdura en la calle, y hasta arte callejero como esta pared.
Y es que la zona de Navigli tiene mucha vida, los canales, o mejor dicho, el agua, da a la gente actividad y ganas de vivir en torno a ella.
Callejeando por allí fuimos a dar con Taglio, un concepto de gastronomía con visión de futuro, un lugar con rollo, como digo yo. Cuando entré pensaba que sólo era una charcutería, pero cuando pasas sus paredes de ladrillo y sus estanterías de madera, te encuentras un mundo relajante, con una pared hecha de papel de verduras, vinos a la venta, y montón de gastronomía en sus baldas.
Cuidan el detalle, y personalizan todo, se han creado una marca personal que quieren difundir desde allí. No me importaría hacerles una entrada aparte porque realmente fui todo un privilegio pasar un par de horas allí.
Otro plato que quería probar en Milán, era el risotto a la milanesa. Este venía con frutos secos (¡bravo!) como almendras o uvas pasas, un sabroso plato que recomiendo probar.
Y para rematar la jornada, el típico capuccino, que por cierto, la foto es de la cafetería más cutre donde he estado, aunque el capuccino estaba muy bueno, ¡sí hasta el del McDonalds está bueno! (yo lo he probado, pero no lo digáis por ahí).
¡Ah no, que para rematar la jornada nos quedaba el aperitivo! Ja ja ja. Supuestamente uno de los mejores de Milán (según mis amigos) es Blender, ¿por qué? por su gran variedad de platos. En pocos sitios te ponen un lomo de salmón, o te hace unos bocartes (por cierto, exquisitos aunque un pelín fríos) como aperitivo.
Un cóctel y un "sírvase usted mismo" por sólo 10€.
Il Castello Sforzesco, el museo Novecento o subir al Duomo, otra de las cosas obligatorias de Milán. Buenas vistas y un privilegio poder acceder a la cubierta de una catedral, eso sí, maldita lluvia meona, ¡el foggy foggy que llaman los ingleses!
Y es que a pesar de ser una ciudad un poco fea (con permiso de mis amigos italianos) y quizás no súmamente bonita como es Roma, tiene un encanto especial, tiene ambiente y tiene un Duomo que simplemente merece la pena la visita por eso.
Apurando el tiempo, una visita a Santa María delle Grazie, donde se encuentra la última cena, o mejor dicho, Cenando Se Entiende La Gente. Bueno realmente esa noche no se entendieron muy bien, ¡culpa de Judas!
Y para despedirme, ¡una pizza! Hay que coger energías que subirse a un avión da hambre. Gracias a Gonzalo por ser un buen anfitrión, y a todos los amigos que me han hecho pasar unos días
viernes, 10 de enero de 2014
#gastrorecomendaciones ¡despiézate!
Está claro que en España no salimos de la trufa, el ceviche y la puñetera burrata, ¡todos los restaurantes lo tienen! Te lo enmascaran con que este restaurante es de madera ambientado en una sauna de Suecia, o el rollo industrial o cocina con sonidos y a oscuras, pero lo que realmente importa, que es la comida, no deja de ser, sota, caballo y rey.
Esta semana que he estado en Madrid (ahora volando a Milán), fuí a Sala de Despiece, un lugar de aspecto nada apetecible, porque recuerda como bien dice su nombre, a la cadena de despiece de un matadero, pero es algo diferente, y también es diferente su carta. Chuletón con trufa y tomate (y sal Maldon) un ejemplo de que sí hay luz al final del tunel y sí se puede hacer nuevas cosas, incluso presentarlas de manera diferente al tradicional plato. ¿Listo para el sacrificio?
Esta semana que he estado en Madrid (ahora volando a Milán), fuí a Sala de Despiece, un lugar de aspecto nada apetecible, porque recuerda como bien dice su nombre, a la cadena de despiece de un matadero, pero es algo diferente, y también es diferente su carta. Chuletón con trufa y tomate (y sal Maldon) un ejemplo de que sí hay luz al final del tunel y sí se puede hacer nuevas cosas, incluso presentarlas de manera diferente al tradicional plato. ¿Listo para el sacrificio?
martes, 7 de enero de 2014
¡El día de la motivación!
Hoy, 7 de enero, podemos celebrar el día de la motivación. Pon un círculo en el calendario y que no se te olvide para el resto de la vida.
Hoy, la mayoría de la población (española), se encuentra motivada en cualquier aspecto de la vida, sobretodo lo que concierne el aspecto saludable, o la salud en general.
Los gimnasios se llenan, las cenas desaparecen, la palabra "detox" está en la boca de todo el mundo...y yo me pregunto, ¿por qué una dieta "detox" ahora?, ¿te has "intox" mucho estas navidades? Lógicamente no estamos educados nutricionalmente del todo bien, pero para eso están muchos compañeros míos en este mundo, y para eso estoy yo aquí.
No nos vamos a parar a pensar todo lo que hemos hecho mal, es pasado, pero lo que sí quiero coger de este día 7 de enero es una cosa, la motivación. Hay que aprovechar esa motivación contagiosa para embarcarse en una dieta saludable que continúe durante toda tu vida, y una vida activa que tiene que continuar semana tras semana, así que no estás tan desencaminado a la moda de "cambiar" tu vida de hoy en adelante, simplemente aprovecha esa motivación, y que el viernes cuando sigamos hablando, no te hayas plantado delante de la nevera con lágrimas en los ojos mientras observas unas rajas de chorizo ibérico que sobró de navidad, ¡qué el ritmo no pare!
#motívate
Hoy, la mayoría de la población (española), se encuentra motivada en cualquier aspecto de la vida, sobretodo lo que concierne el aspecto saludable, o la salud en general.
Los gimnasios se llenan, las cenas desaparecen, la palabra "detox" está en la boca de todo el mundo...y yo me pregunto, ¿por qué una dieta "detox" ahora?, ¿te has "intox" mucho estas navidades? Lógicamente no estamos educados nutricionalmente del todo bien, pero para eso están muchos compañeros míos en este mundo, y para eso estoy yo aquí.
No nos vamos a parar a pensar todo lo que hemos hecho mal, es pasado, pero lo que sí quiero coger de este día 7 de enero es una cosa, la motivación. Hay que aprovechar esa motivación contagiosa para embarcarse en una dieta saludable que continúe durante toda tu vida, y una vida activa que tiene que continuar semana tras semana, así que no estás tan desencaminado a la moda de "cambiar" tu vida de hoy en adelante, simplemente aprovecha esa motivación, y que el viernes cuando sigamos hablando, no te hayas plantado delante de la nevera con lágrimas en los ojos mientras observas unas rajas de chorizo ibérico que sobró de navidad, ¡qué el ritmo no pare!
#motívate
viernes, 3 de enero de 2014
#gastrorecomendaciones ¡ya vienen los Reyes Magos!
A un par de días de que los Reyes Magos hagan su presencia (muchas risas pero bien que queréis tener el 6 regalitos ¡eh!), la noche de antes hay que tener la barriga llena y disfrutar de una buena cena en familia, con amigos, o algunos con sus majestades.
No sé yo si La Cocina de San Antón guarda una estrecha relación con ellos, pero la noche del 5 de enero han montado una cena por todo lo alto a base de jamoncito 5J con pan de cristal, pimientos rellenos de changurro, unas tostas variadas, un exquisito consomé para entonar el cuerpo del frío madrileño, y para rematar, capón de Cascajares, ¡ah y roscón! Estáis tardando en reservar.
No sé yo si La Cocina de San Antón guarda una estrecha relación con ellos, pero la noche del 5 de enero han montado una cena por todo lo alto a base de jamoncito 5J con pan de cristal, pimientos rellenos de changurro, unas tostas variadas, un exquisito consomé para entonar el cuerpo del frío madrileño, y para rematar, capón de Cascajares, ¡ah y roscón! Estáis tardando en reservar.
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