No voy a decir el típico "parece que fue ayer", pero sí me acuerdo perfectamente como ahora mismo de la primera entrada que escribí, "abriendo el apetito". No tenía ningún miedo pero sí que me venía a la cabeza lo normal "¡a quién le importará lo que yo escriba!". Eso se esfuma cuando recibes el primer comentario de apoyo...y bueno, hasta hoy.

Y hoy también, día 28 de mayo se celebra el Día Nacional de la Nutrición, no fue nada premeditado empezar el blog ese día...casualidades de la vida, asi que, felicidades también para la nutrición.

¡Un año! la verdad es para celebrarlo, porque a lo largo de este año han ocurrido muchas cosas (gastronómicamente hablando) casi 40.000 visitas (gracias a todos vosotros), una cantidad muy grande de restaurantes a lo largo de España, jurado en el concurso de tapas de Zamora, reuniones y quedadas con gente entendida en gastronomía, gente interesante, restaurantes que me han invitado a degustar sus platos, viajes a lo largo y ancho del mundo, asistencia a diferentes congresos relacionados con el mundo de la nutrición, largas charlas con verdaderos profesionales de la alimentación, y todo sea dicho de paso, sentirme un pequeño embajador de Zamora, porque no hay persona con la que esté que no se la venda de la mejor forma posible.




Gracias a todos por leerme y seguirme, a mis padres por estar en la sombra (como ellos dicen) a mi amiga Raquel Rodríguez de por ser la artífice de la cabecera, a todos mis amigos por acompañarme en mis andaduras gastronómicas y en esos momentos en los que saco el iPhone para fotografíar los platos con un "esperad por favor, que le tengo que hacer una foto" (un hurra por vosotros), gracias a todos esos profesionales de la alimentación por abrirme sus casas, la verdad poco más puedo decir.

Seguro que esta entrada no ha quedado original, ni bien redactada por todo lo que quiero expresar, pero como veis y siempre he dicho, a parte de no ser un crítico gastronómico, tampoco sé escribir muy allá, aún así, lo que quiero haceros llegar está bien claro, GRACIAS.

PD: Ya sabeis que no soy goloso y que apagar velas en una tarta como que no...asi que las he soplado en un riquísimo bocadillo de jamón iberico, ¡por vosotros!