miércoles, 10 de abril de 2013

Real Café Bernabéu, ¡gol en el minuto 1!

Ya que ayer ganó el Real Madrid, vamos a celebrarlo con una buena comida, y mejor aún, con vistas al Santiago Bernabéu, #halamadrid




El lunes me invitaron al Real Café Bernabéu para probar el cambio de carta, en esta ocasión la de verano. A mi que me pongan una mesa con esta vista pues me enamoro, y mira que no soy futbolero, pero ¡qué mejor televisión que el Bernabéu!




Y digo gol en el minuto uno, porque si juntamos a un maestro de ceremonias como Florencio Salchidrián y un jamón de los Pedroches, directamente pasamos a semifinales como el Real Madrid.
Caracteristicas principales del jamón: color, sabor, textura y aromas y muy importante cortar el jamón a una temperatura entre 24 y 27 grados, ¡asi que los de Sevilla, ni idea! (Es broma, que os lo tomáis todo a pecho).




El primer plato (precioso plato de cristal, todo sea dicho) estaba compuesto de 4 tapas:
- Queso de cabra gratinado con ensalada y salsa de mostaza, fácil triunfar con este rico plato
- Tomate confitado con salsa de perejil, algo novedoso para mi y que me parece que tiene un gran trabaja detrás
- Hummus con jamón, sabroso
- Gazpacho con sorbete de limón, exquisito y sorprendente, ¡ah, y fresquito!




Seguimos con el segundo, que no es de cristal pero que me lo comí encantado, el plato no claro...¿o me quedé con las ganas?
- Brocheta de chipirón con tinta de calamar, bien frito
- Codorniz con tallarines, ¡qué crujiente! Y que poco comemos codorniz
- Hamburguesa, bien aunque el pan no me gustó
- Rollito de ternera, un rico snack




Para terminar una minitarta de queso muy suave y con un sabor de la leche muy buena. En el otro lado del campo, el brownie con helado, esponjoso y mezcla que casa muy bien.

Situado en Av. Concha Espina 1, Madrid

Consejo nutricional: Más allá de los huevos de codorniz, está el bicho en sí y además con muchos beneficios como el alto contenido en vitaminas B3 y B6 esta última recomendable en enfermedades cardiovasculares, diabetes, depresión, pero cuidado, ¡qué no son medicamentos!

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