La semana pasada recibí un e-mail de Londres para disfrutar de un menú degustación por parte de Mestizo, un mexicano situado en pleno Barrio Salamanca.
Cuenta con otro hermano gemelo en la capital inglesa, por lo que es todo un privilegio contar con ellos aqui en Madrid, ¡hay vida más allá de La Malquerida!
Recogí a mi prima Marina con la moto y nos fuimos directos y puntuales hasta México, perdón, Mestizo. Por fuera unas grandes cristaleras que por el día deben ser todo un privilegio disfrutar alli de una buena comida.
Todo tipo de tequilas detrás de la barra. Mestizo, a parte de ser un restaurante de auténtica comida mexicana, también es un "Tequila Bar", donde te puedes tomar unos mojitos, unos margaritas y disfrutar con tus amigos de un buen rato. Suele ser un sitio muy frecuentado por gente de corbata y tacones (cada uno por separado obviamente) ya que es uno de los afterwork de la zona.
Por dentro unos grandes sofás, paredes blancas y rojas que no alteran al comensal y lámaparas con luz tenue. La decoración es escasa, todo viene de la mano de los platos que le dan el colorido al local.
Para ir entonándonos, Juan Carlos nos trajo unos margaritas muy buenos, poco cargados (que estábamos en lunes), muy fríos y muy bien preparados.
La atención de Juan Carlos fue increible, nos explicó todos y cada uno de los alimentos/ingredientes/formasdecocinado de los platos que llegaban.
Como aperitivo, unos nachos con salsa verde que está hecha a base de tomates verdes, aguacate y pimientos verdes. Picaban un poco, pero Marina y yo somos de lengua y estómago resistentes. Por cierto, Juan Carlos nos comentó que los nachos no son típicos mexicanos, como bien dijo él, "eso es de TexMex".
Continuamos con un plato de antojitos, como lo llaman ellos. Al fondo, una típica flauta mexicana que viene a ser una tortilla con pollo y lechuga picada, muy jugoso. A la derecha, tamal típico del Estado de Oaxaca que es pollo, masa de maiz y mole, a Marina no le gustó mucho. Estaba bueno pero es muy seco.
A la izquierda una quesadilla rellena de queso, muy consistente y sabrosa, genial para los que somos queseros.
Y para acabar, lo que parece una croqueta es un jalapeño, ¡me apasionan! En Suiza siempre que he ido, me he puesto hasta arriba en el Tibits a comer jalapeños. Un pimiento rebozado y picante y con una textura por dentro de 10.
En el restaurante preside un gran calendario azteca o "calendario mexica" como más se le conoce, nada que ver con el maya y el fin del mundo, eso es otro cantar.
He aqui un gran surtido para hacer tacos. Los 4 centrales son el relleno de las tortillas que venían aparte, y los 8 restantes son los acompañamientos, como cilantro, cebolla, frijoles, salsa verde y roja, mole...
Empezando por abajo, cochinita pibil condimentada con achiote una semilla americana muy usada en la cocina mexicana, me resultó muy sabroso.
El siguiente relleno es alambre de ternera, pimiento y queso, mucho queso, la más jugosa.
El tercer cuenco, tinga de pollo con tomate y cebolla, vamos con salsa chipotle que picaba que daba gusto. En ese momento la rubia ya empezaba a poner paras raras. Ja ja ja
Y para acabar, pastor tradicional que es cerdo con piña y achiote, ese podría considerarse el más dulzón por parte de la piña.
Todos ellos los puedes acompañar como quieras, no hay reglas estipuladas. Aqui una tortilla con base de frijoles, cochinita pibil y cebolla, muchos contrastes pero de lo más sabrosa.
¡Aqui tenemos el totem! Estábamos tardando en descubrirlo. Una réplica del totem Atlante de Tula
El postre un pastel de lote, hecho a base de maiz dulce. Nos gustó pero llena mucho ya que al estar hecho de maiz es muy compacto.
Una curiosa muñeca mexicana hecha artesanalmente. Cuando estuve en México predominaban en los mercadillos, aunque las recuerdo con ropa y mucho más coloridas.
Aunque nosotros no tuvimos que echar mano a nuestra escasa economía, decir que el precio medio son 25€ aproximadamente, por lo que está bien, además la calidad es muy buena. La atención exquisita por parte de Juan Carlos y gracias desde España a Daniel porque es un profesional como la copa de un pino.
Situado en C/Recoletos 13, Madrid
Consejo nutricional: El postre llena mucho, son muy denso asi que mejor para compartir. Cocinan con maiz que es un cereal que llena mucho, lo usan tanto como nosotros el trigo.
Qué buena pinta tiene la comida y el local¡ lástima que me pille a desmano...
ResponderSaludos :-)
Yo estuve hace ya unos meses. Me encantó no solo la comida, también el diseño, muy alejado del típico mexicano. Me pareció elegante y con buen precio. Súper recomendable. Me has dado una idea para revisitarlo y dedicarle un post.
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