martes, 3 de julio de 2012

¡Bienvenidos a American Airlines!

Leyendo el título pensaréis, ¿qué hace este metiendose en estos fregados? Tenéis razón, me meto en camisas de once varas, pero todas tienen un fondo relacionado con la alimentación, y esta vez no va a ser menos.

Os sitúo un poco: he estado haciendo la Ruta66 estas 2 semanas pasadas, y el sábado tocaba regreso a casa desde Los Angeles a Madrid. Vuelo a las 9 de la mañana (hora en LA) y regreso en Madrid a las 8 de la mañana del domingo. Todo bien hasta aqui.

Subimos al avión y al cabo de una hora nos desalojaron y tuvimos que volver al finger (pasarela de acceso a las aeronaves) debido a un problema mecánico. A todos nos puede pasar, estoy de acuerdo. Al cabo de una hora, nos llamaron porque volvíamos a embarcar en el mismo avión, "muy rápido lo han arreglado" pensé. Nos subimos de nuevo y en el momento del despegue nos volvieron a decir lo que nos habían dicho hace un par de horas, que volvían a evacuar por segunda vez el avión por un fallo mecánico, ¿dónde está la gracia? Madres con 2 y 3 niños cargados como mulas, maletas que volaban por encima de nuestras cabezas y azafatas que lo único que decían era "sorry" con cara de asco. "¡Señoritas, que la culpa no es nuestra!".

Era ya la 1 del mediodía, y aún seguíamos en tierra...Teníamos una conexión en Nueva York y lógicamente la habíamos perdido. En ese momento es cuando las cosas ya no me empezaban a hacer ninguna gracia, porque perdimos más conexiones.

Embarcamos por tercera vez, ahora sí, en una avión supuestamente nuevo (si lo sé hubiese dejado un chicle pegado en mi asiento para saber si era el mismo) el cual salió con retraso, 14.30 y ya estábamos en el aire, por fin.




Había desayunado a las 7 de la mañana y tenía hambre, hasta que vi a las azafatas desagradables con carrito...¡por fin llegó la hora de comer! Para nuestra sorpresa, no daban de comer, te ofrecían un menú que tenías en la carta, perdón, te ofrecían un pack que tenían en la carta. No daba crédito, después de la movida que hemos tenido, ¿nos vas a cobrar por algo que es vuestra obligación?. Me pareció tan vergonzoso que sólo podía expresarme en español, porque en inglés no me salen las palabrotas como es debido.




Ahi no queda la cosa, de los diferentes packs que tenían en carta, sólo y exclusivamente contaban con uno, es decir, que no podías elegir porque había lo que había. Llevábamos 6 horas sin comer y encima nos teníamos que comer esta porquería por decir algo suave...además todo aderezado con sus caras de asco y como si la culpa fuese nuestra. Son 20$ gracias.

Llegamos a las 22.30 horas a Nueva York, con no se cuantas horas sin comer nada decente...y como habíamos perdido varias conexiones, lo único que había era un vuelo a las 11 de la noche para Londres. Corriendo para la puerta de embarque y sin poder comer nada. Cuando llegamos nos sirvieron una cena. ¡Por fin comía algo en todo el día!

Hasta aqui mi queja a American Airlines.




Aunque tuvimos algun contratiempo más como que se murió una chica en pleno vuelo y que nos desviaron a Canadá, eso no es reprochable a la compañia, son cosas que pasan y ya está.

Lo que si es reprochable es la mala atención, el abandono al pasaje. Un vuelo no puede pasar más de 4 horas sin comer, aunque sea un vuelo interno, están obligados a servir comida, también reprochable la pérdida de las maletas, la pérdida de conexiones, la mala gestión, la falta de información, la desatención. Jamás me había pasado una cosa semejante y cojo vuelos todos los meses, por lo que para mi queda vetada esta compañia. Entiendo los contratiempos y los errores humanos y no humanos, pero lo que no tolero es la falta de atención y que nos traten como ganado, somos seres humanos, y pagamos por un servicio.

Guillermo Rodríguez Fernández

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